13.1.12

Purificará sustancias tóxicas que están en los 144 m3 de jugos de basura generados al día

Hasar’s ya tiene planta de tratamiento de lixiviados

Instalación en relleno sanitario requirió una inversión de $20 millones. Tienen proyectado iniciar con la generación de energía eléctrica a fin de año.

El proceso para limpiar los jugos de la basura requiere seis horas.
El proceso para limpiar los jugos de la basura requiere seis horas. Fotos: Víctor Fernández
La planta tiene capacidad para tratar 15 metros cúbicos por segundo.
La planta tiene capacidad para tratar 15 metros cúbicos por segundo.

El relleno sanitario privado Hasar’s ya cuenta con una planta de tratamiento de lixiviados, la cual tiene capacidad para sanear quince litros por segundo. Actualmente la planta está purificando 1.3 litros por segundo.

El director del relleno sanitario Hasar’s, José Luis Contreras Becerra, informó que en el lugar se generan 144 metros cúbicos de lixiviados al día, los cuales antes se evaporaban al ambiente y se reinyectaban en las montañas de basura.

La planta de tratamiento de lixiviados de tecnología canadiense, que requirió una inversión de 20 millones de pesos, limpiará las sustancias tóxicas que se encuentran en los jugos de la basura con un proceso físico químico con polímeros, nanotecnología con arenas, electro magnetos y luz ultravioleta, el cual toma seis horas. “Lo que hacemos es quitarle la materia orgánica al agua, esa agua que generamos con nuestras naranjas, en los jitomates que consumimos en nuestros hogares y que luego llega al relleno. Lo que hacemos es capturar la materia orgánica y convertirla en un lodo, que se puede convertir en un mejorador de suelos”, indicó José Luis Contreras.

El agua tratada se utilizará para humedecer las celdas de basura del mismo tiradero, para regar áreas verdes, así como un área de pastizales que se habilitará en el mismo terreno de la empresa.

Contreras Becerra comentó que el agua ya tratada podría llegar a niveles de calidad de potabilización con un sistema de evaporación y decantación, para lo cual se necesitaría que, una vez tratado el líquido, pase por paneles solares para que se gasifique, se condense y se separen las sales del agua. Lo cual aún no se hace.

Con la planta –cuya operación costará diez pesos por cada litro de lixiviado tratado– se pretende cumplir con la norma 001 de descargas de la Comisión Nacional de Agua (CNA), pero aún falta que la comisión dé la autorización para la descarga del agua tratada. Se calcula que el aval se podría obtener este mes.

El tiradero de Hasar’s también cuenta con instalaciones para la quema de gas metano que se genera en el basurero. Se queman 1,300 metros cúbicos por hora, por lo cual la empresa recibe bonos de carbono por reducir los gases de efecto invernadero que se arrojan a la atmósfera.

El director general de la empresa Hasar’s, Juan José Hawa Sarquis, informó que existen planes para que en noviembre o diciembre próximo se genere energía eléctrica a partir del biogás.

“En lugar de soltar el gas metano, que es muy contaminante, a la atmósfera, al quemarlo contaminamos cien veces menos. Estamos integrados en bonos de carbono, inclusive a fin de año ya está el proyecto para iniciar lo de la generación de energía eléctrica”.

Se calcula que se podrían generar ocho megawatts por hora.

En el tiradero de Hasar’s se encuentran confinados tres millones cien mil toneladas de basura en dos macroceldas, una de las cuales ya está cerrada.

Cada día, a este tiradero arriban entre 800 y mil toneladas diarias de desechos. De estos, 50 por ciento proviene de los habitantes que viven en el municipio de Tlaquepaque y el resto de empresas particulares. En el proyecto ejecutivo del basurero se establece que el lugar dejará de recibir residuos sólidos en 2060.

Juan José Hawa Sarquis negó que alguna vez se haya contaminado el arroyo Grande, en Milpillas, como lo han asegurado en repetidas ocasiones los pobladores vecinos del tiradero: “Nosotros por algo ganamos el juicio porque no teníamos ninguna pena, nosotros no estábamos tirando los lixiviados, ésta es una empresa en la cual puede tener una contingencia, el chiste no es la contingencia, el chiste es arreglar la contingencia, una de las mayores cosas de las que nos hemos preocupado es porque los lixiviados, cuando tengamos una contingencia, no salgan del predio y poder recuperar todo lo que se tira”.

Guadalajara • Elizabeth Rivera Avelar

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